Se terminó la participación de Los Dorados en el Torneo Apertura 2015 de la Liga MX y aquí hacemos un resumen de los numeritos finales que tuvo el equipo, los cuales, no han sido muy satisfactorios, pero siempre existe la esperanza de que vengan tiempos mejores.
Primeramente tenemos los marcadores de los partidos individuales.
Los primeros 10 partidos fueron dirigidos por Carlos Bustos, el de la fecha 11 por Omar Briseño y los últimos 6 por Luis Fernando Suárez.
Aunque los números fueron malos en lo general, resultaron menos peores los que se tuvieron de local, que tampoco fueron cosa del otro mundo, 
pero ligeramente más decentes que los de visitante.
En ganados uno más de local, en empates, dos más de local y en derrotas dos más de visitante.
La efectividad con que se jugó tanto de local como de visitante, estuvo por debajo de lo necesario, de modo que aunque en el próximo torneo globalmente se jugara de la misma manera como se jugó de local en el torneo anterior, de todos modos no bastaría para mantener la categoría.
Además de local, Dorados para mantenerse en la Liga MX tendrá que mejorar mucho de visitante, donde en 8 partidos promedió más de dos goles recibidos por encuentro mientras que anotó menos de 1.
De local recibió un poco más de 1 gol por partido, pero anotó menos de 1, por lo que vemos que si la defensiva estuvo mala, la ofensiva peor.
En cuanto a los goleadores del equipo, si es que se les puede llamar así, ya que la cosecha fue raq
uítica, apenas 13 en total, el máximo lo fue Roberto Nurse con 4, el México-panameño había manifestado su intención de lograr cuando menos 6, empezó bien, apenas en la jornada 8 había llegado a 4, pero se estancó y ahí se quedó.
Los otros goles fueron esporádicos con la distribución indicada en la tabla.
Continuaremos en esta entrada con más numeritos, en breve los más importantes, los del descenso, donde haremos un amplio análisis de cómo está la situación y ver que tan factible es que Dorados salve la categoría.
LOS NÚMEROS DEL DESCENSO
Y dejamos lo peor para el último, los números del descenso que lucen terroríficos para la causa de Los Dorados.
Lo malo es que son números demasiado desfavorables, pero lo bueno es que no está perdido todo, todavía hay esperanzas.
Actualmente Dorados tiene 15 puntos en 17 partidos y con otros 17 encuentros por jugarse, comparado con otros equipos, el que tiene más cerca, o menos lejos, es Morelia con 94 puntos en 85 partidos, en el mismo número de encuentros Guadalajara tiene 96 unidades y Puebla 100, siendo éstos los equipos “alcanzables”, ya los demás están más arriba.
En números enteros Dorados se encuentra a 17 puntos del Morelia, o sea, pase lo que pase con los demás, así hagan todos cero puntos, si Dorados en el próximo torneo hace menos de 17 puntos, está descendido, la cantidad aumenta en 1 por cada 3 que haga el conjunto michoacano, o sea, si Morelia hace en el próximo torneo: (0, 3, 6, 9, 12, 15, 18, 21, 24, 27) puntos, Dorados para quedar arriba de Monarcas necesita hacer: (17, 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 26).
Como se puede apreciar, con más de 25 puntos en el próximo torneo, Dorados tendría muchas posibilidades de salvarse, porque obligaría al Morelia a hacer de 28 para arriba, pero si Dorados no supera la cifra de los 25, difícilmente va a poder mantener la categoría.
Por ejemplo si Dorados hace 22, entonces Morelia con 16 tendría y el Pez hace 24, a Monarcas con 22 le alcanzaría.
El punto de equilibrio serían los 25 puntos, si Dorados hace 25 puntos, Morelia requeriría también 25 puntos para quedar arriba del Pez.
El objetivo para Dorados será superar los 25 puntos, no será fácil, pero tampoco imposible, se requerirá un torneo de liguilla, haciendo los puntos necesarios para calificar a liguilla, es muy posible que alcancen también para eludir el descenso.
Muy importantes serán los empates, si se busca el empate pudiendo ganar, sería un suicidio, los empates sirven de consuelo, numéricamente aportan muy poco, un empate está más cerca de la derrota que de la victoria, de modo que no ayudan para subir y solamente sirven para desacelerar la caída, que no quita que sea caída.
Cada derrota en este torneo será un clavo en el ataúd y cada empate también, a no ser que sea de visita y después de una victoria, solo en este caso un empate sería un buen resultado.
Nos espera un torneo con el Jesús en la boca y como decía Juan Manuel Lillo, con la calculadora en la mano todo el día, pero para los que no les gusta lidiar con las matemáticas, en este blog haremos los cálculos para facilitar las cosas.
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